Los arneses de seguridad están diseñados de forma tal que las cintas o bandas que lo forman permiten al usuario
distribuir las fuerzas de detención en partes resistentes del cuerpo (parte superior de los muslos, pelvis, pecho y
hombros) y a la vez, impedir que el cuerpo del usuario se deslice fuera del arnés en caso de una caída. Posee un
único punto de detención de caída libre que es una argolla en D ubicada en la espalda. La argolla en el pecho es
usada para sistemas de ascenso/descenso y rescate, argollas laterales de posicionamiento y en los hombros para
rescate. Se incorpora indicador de activación o testigo, el cual facilita la inspección previa a su uso ante cualquier
activación del arnés a causa de una caída.